![]() |
| Portada de Súper Carpanta n.º 42, Octubre de 1980. |
![]() |
| Zipi y Zape, petándolo en clase. Felicidades, chavales. Seguid así y en treinta añitos tendréis un blog sobre paleotebeología que hará las delicias de adultos que aún meriendan. |
¿Qué vengo a decir con esto? Pues que la posguerra no fue pa tanto. No, es broma. Lo que vengo a decir es que las "reglas" que un autor impone a su personaje son menos reglas que directrices, como decía Barbossa. En un corpus tan vasto como el de un autor de Bruguera (Escobar dibujó a Carpanta entre 1947 y 1985 como mínimo), esas pocas transgresiones sólo cementan la premisa de la serie: la excepción hace la norma. Los autores, además, saben cómo romper esas reglas sin que todo se desmorone. Aunque la historieta en que Zipi y Zape sacan sendos dieces sea la única que has leído en tu vida, sabrás que no es lo habitual.
(Acabo de caer en que seguramente es por Escobar que conozco el determinante sendos. ¿Sabéis cuando la gente dice "tal cosa que leí en un libro u oí en una serie tiene piso gratis en mi cabeza"? A veces son cosas útiles.)
*
Las no escasas ocurrencias de Carpanta comiendo me vinieron a la cabeza hace unos meses cuando estaba hojeando Superhumores y me di cuenta de un patrón curioso. Esta es una historieta de Mortadelo y Filemón que la Página No Oficial de M&F data de 1980. Cuelgo sólo la primera viñeta y la última:
No creo que haga falta una sinopsis de las seis páginas que median entre estos dos extremos. Básicamente, el antagonista es un señor armado con un aerosol que te congela al instante, y las dos catástrofes calvas, en un raro acceso de competencia, consiguen derrotarle y darle a probar su propia medicina. Final inmitigadamente feliz, sin hospitales ni persecuciones, y con ruptura de cuarta pared y todo. "Felices pascuas, queridos lectores."
La navidad parece un motivo de peso para permitir a M&F una tregua en su retahíla de fracasos. Retrocedamos unos años, por ejemplo, a 1973. La historieta se titula "¡La conquista de la Tierra!". Aquí, el final:
Otra: "Joe Tapón", 1966:
No todas las navidades son felices, ojo. Esta es "¿Pavo o pollo?", 1962:
![]() |
| Ojo a Ibáñez con pelo. Sólo hacía tres años que creó a M&F. |
Cuando planeaba este post, lo confieso, buscaba confirmar una teoría, o prejuicio, de que los finales felices para Mortadelo y Filemón son más comunes en historietas hechas por ectógrafos. Las muestras que he encontrado, sin embargo, no me dan la razón estadísticamente. Sólo la de 1980 es claramente de Ramón Casanyes; la del 66 no tiene firma, pero la Página No Oficial la atribuye a Ibáñez; de la del 73 cabe poca duda.
Mi impresión, aun así, sigue siendo que los ectógrafos tienden a ser más flexibles con la regla no escrita del final catastrófico, la persecución, y el "Mortadelín, Filemoncete, salgan, salgan". Una razón es que la historieta corta (4-8 páginas) como la que sale en un extra de navidad es más probable que la haga un dibujante apócrifo, porque Ibáñez suele estar concentrado en las historias largas cuyos episodios salen en la revista Mortadelo regular. Otra es que, como ya explicamos en su día, los ectógrafos, frustrados por el anonimato, buscan innovar mientras se les permita, probar cosas nuevas, llevar los personajes a su propio terreno. Hasta cierto punto, puede incluso que quieran distanciarse un poco del cinismo de Ibáñez, cuyos finales amargos no siempre son causados por la incompetencia o mala fortuna de los protagonistas, sino por su ocasional y demostrada mezquindad.
El contraste entre los dos terremotos de Ibáñez y los de Escobar, de hecho, es muy interesante. Zipi y Zape, hasta donde yo sé, eran traviesos, sí, y desgraciados, pero nunca malas personas. Lo cual no impedía que los finales felices fuesen tan raros como en M&F. Escobar no era un cínico. Lo que me lleva a preguntarme si Ibáñez tenía más éxito porque sí lo era. Conjetura que, en sí misma, es cínica.
(Si alguien tiene la impresión de que estoy escribiendo tal cual pienso, sin intención de desembocar en ninguna tesis interesante, hola, qué tal, me llamo Edgar, bienvenidos a mi blog.)
*
![]() |
| Cálmate, Carpanta, que ahora llego a la conclusión. Que te piensas que vengo aquí con el artículo planeado y el guion hecho. Que no soy Escobar, ¿eh? Soy más bien Ramis. |
Yo, que tengo una relación complicada con la navidad, veo una lección ahí: si incluso una editorial tan encasillada en sus propias reglas como Bruguera, tan casta y tan timorata y tan agarrada a "lo que funciona", sabía aflojarse un poco el corsé al menos un mes al año, creo que podemos todos. No hace falta celebrar la navidad para seguir la corriente al cristianismo, al capitalismo, o a gente que no te cae bien, pero mola celebrarla para cagarse en la regularidad, porque los días del año que no celebras nada tampoco molan mucho. Mola hacer algo especial, sorprender a tu público. Sorprenderte a ti.
Rompe normas. Sé Carpanta, y come. Él lo hace.










No hay comentarios:
Publicar un comentario
Sujeto a moderación. No se publican comentarios con mala ortografía o tono borde.